Las críticas también se extendieron a Víctor De Gennaro, padrino político de Micheli. "De Gennaro nunca pensó que podía perder la CTA. Necesitaban manejarla en función de su proyecto político. Hoy que la realidad le dijo lo contrario no está dispuesto a aceptarlo. No tienen plan B. Ganan o fracturan la CTA", señaló Roberto Baradel, candidato de Yasky a liderar la central en la provincia de Buenos Aires.
Sus asesores también trabajan en la impugnación de la elección de Mendoza, donde el oficialismo denuncia que 124 urnas se mantuvieron ocultas en una sede de ATE, que otras urnas fueron violadas (dicen contar con videos) y que hubo manipulación de los padrones para que sus afiliados no pudieran votar.
A este caso, que se suma a la suspensión de los comicios en el distrito bonaerense de Ezeiza-Esteban Echeverría, podría añadirse la provincia de Tucumán, donde Yasky también prepara una impugnación. Un grupo de listas regionales opositoras planean impugnar la votación de Santa Fe.
En Tucumán, el referente de Yasky, Gustavo Rollandi, señaló a LA GACETA que en esta provincia se verificaron "numerosas irregularidades: padrones adulterados, más mesas de las previstas y candidatos que a su vez eran delegados electorales". El dirigente indicó que el viernes se guardaron las urnas en Moreno 850 para hacer el recuento el lunes. "Hoy (por ayer) nos presentamos y nos dijeron que el domingo ya habían mandado los resultados a la junta electoral", apuntó. Recalcó que tampoco les hicieron conocer los números finales de la votación. Insistió en la necesidad de que haya nuevas votaciones en los tres distritos cuestionados y recalcó que si se garantiza una elección transparente, el sector respetará la voluntad de los trabajadores.
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